Friday, November 21, 2008

Asuntos de familia cap 2

ATENCION GENTE...ESTE CAPITULO EN ESPECIAL ES MUUUUY CONTROVERSIAL Y DE NINGUNA MANERA APOYO UNA VIOLACIÓN O ALGO PARECIDO...TIENE QUE VER POR LA TRAMA...
vuelvo a reiterar que este cuento no se recomienda a gente impresionable o de poco criterio...no me vayan a querer quemar en leña verde...dicho esto y sobre advertencia no hay engaño continuemos:



Presencias Incomodas

Unas manos fría y turbias recorrían los muslos adormilados de Claudia, acariciando lascivamente subian hasta las dulces caderas y bajaban a esos tobillos destapados, debajo de su camisón iba entrando otra mano, torpe y concisa, sabiendo su objetivo, a donde tenía que dirijirse, el todavia dormido pezón izquierdo de ella, poniendolo entre sus dedos lo acariciaba hasta el punto de ponerlo duro y lo frotaba con pasión, esto siempre despertaba a Cladia con un gemido ahogado.

-Simpre empiezas por el izquierdo...-dejo la frase al aire, como susurrandola a ella misma o a una presencia inmutable, en el timbre se denotaba un cierto cariz de culpa con deseo y resignación.

Una lengua tibia y larga se mecía en el pubis de la muchacha mientras otra se hundia entre sus nalgas, manos interminables le quitaban lo que le quedaba de ropa al ritmo de las lengüetadas y contosiones del cuerpo femenino.

Ella ya se había aconstumbrado, o se había hecho demasiado insensible, después de ocho meses, si no pones algunos diques mentales en situaciones así puedes acbar muy mal, y desde que dejo de pelear notó que los movimientos lujuriosos se volvían más suaves...pero nunca con alguna pizca de empatía, cariño, o siquiera lástima.

Era Laileb, su amigo imaginario, ya hacía algunos años que empezó ella a oirlo, primero como una casi imperceptible voz en su interior, pero fue subiendo de volumen y haciéndose más real, desde hace poco tiempo era que por fin tenía una forma física; Fue entonces cuando por primera vez se unió él a ella de esa forma, y desde ese momento se repetía como reloj tres veces por semana.

Las lenguas seguian excitando a la muchacha de un modo inhumano, duro, y mécanico, como si estuvieran entrenadas para conseguir un orgasmo pero sin nada de pasión, en cambio las manos se movian torpes pero seguras, temblando y magullando algunas veces, llenas de lascivia, llenas de deseo;Una lengua lamía la nuca de la muchacha y bajaba hasta el nacimiento de sus nalgas, la otra se perdía entre su clítoris y de repente arremetía contra su ombligo, y dos se encargaban de lubricar el ano y la vagina de Claudia, cuando esta estuvo al borde de su tercer orgamo empezó la penetración masiva de ella.

Boca, vagina y esfinter eran completamente llenados por tres diferentes penes pertenecientes a Laileb, el acto sexual duraba siempre lo mismo, tres horas, en las cuales Claudia tenía que luchar por no ahogarse, ni las manos ni las lenguas soltaban su cuerpo, ella tenía orgamos interminables aún en contra de su voluntad y lo que era pero era que seguía uno tras otro, al punto que le empezaban a doler, sin embargo nada podía hacer, nada pudo hacer hacer la primera vez, nada pudo hacer las que siguieron...todavía recordaba la primera.

Laileb la había violado desde la primera vez...

Ella...

Que nunca mostró interés por chicos o por alguien más de esa forma.
Nunca supo porque su amigo le hacía eso, y todos la tachaban de loca....eso nunca cambiaría, desde que tenía por hermana a Andrea, la cruz de su parroquia, y pues Carlos tampoco se mostraba comunicativo desde la mordida de Laileb ya hace treinta y dos semanas... como decirle que quien la defendió ese día le hacia esas cosas.

Dos dias se encerro en su cuarto después de la primera vez que Laileb tuvo sexo con ella, por el shock emocional, sin embargo al caer la noche del tercer día volvió a acontecer, sin escapatoria se encontraba...de nada sirvieron suplicas, gritos, berreos, golpes o mordidas, nadie la iba a ayudar, de nada servía el odio, el desdén, el asco, siempre terminaba viniendose una y otra vez, como si Laileb tocara fibras secretas y esa fuera la natural respuesta.

Lo peor...

Y por lo que se sentía culpable era que poco a poco le empezaba a gustar, de un modo extraño sentíase apreciada, mimada y querida, de un modo extremadamente retorcido se sentía no tan mal, pero esto a veces le sonaba ajeno, como implantes que ella no tenía, aún así seguía sintiendose asquerosa y vil; el sentimiento aumentaba los dias que se daba cuenta que queria con ansias que llegara ese momento.

Se decía a si misma que sólo un ser de naturaleza ángelical podía convertir algo así de abominable en algo tan divino...

No estaba tan lejos de la verdad...alguna vez lo fue Laileb...
Y por ello estaba demasiado alejada de la verdad...

Pero Laileb había elegido esta familia por algo...

y pronto su espera daría fruto...

Tuesday, November 18, 2008

Asuntos de familia cap 1

ATENCIÓN, ESTO ES PURA FICCIÓN Y NO SE RECOMIENDA EL RELATO PARA GENTE DE POCO CRITERIO O IMPRESIONABLE...
este es un cuento escrito por moi, lo estare actualizando cada 3 dias, a ver si les gusta:

Asuntos de familia
Andrea tenía frío, la cobija no llegaba a cubrirle los pies si es que queria taparse los brazos y la cara, las pequeñas ventiscas no ayudaban a su condición, y pensó ir a su cuarto para ponerse un pantalón en vez de la falda que traía, pero esto se quedó en sólo pensamiento...estaba incomoda.

-Las cosas que tengo que hacer-dijo para sí con un gran suspiro.

La casa estaba muy quieta, era de esperarse a las tres de la mañana, todavía faltaba una hora para que llegara su hermano, por ello tenía que dormitar en el umbral de la puerta principal pero todo estaba quieto fuera de la casa y con el ipod a todo volúmen no oía lo que podria acontecerle a Claudia...si es que esa noche pasaba algo.

-Limpiar, limpiar, limpiar, ¿Que no se les ocurre que también yo tengo vida?-reclamó indignada, para unas presencias que no se encontraban.

Esto por supuesto era mentira, los días se le escapaban lentamente entre los dedos, como arena profana de una playa finita, y la única manera de poder hacer algo era contra sus chivos expiatorios favoritos, los muñecos de peluche y el ocasional gato descuidado al cual le propinaba, ya sea con la pierna, ya sea con el puño, un doloroso golpe enmedio del peludo cuerpo, así podía permitirse sacar un poco de esa ira contenida ya bastante tiempo.

Ella no era una beldad pero tenía cierta gracia, una gracia que sólo de cerca se apreciaría; como pintura surrealista que al analizarla profundamente se puede comprobar su belleza insuperable...lo cual nunca le había pasado, por lo que las posibilidades que pasará se reducían cada dia que crecía su hosquedad.

Sus cabellos negros y crespos le hacian ocultar los sorprendentemente azules ojos que con temor se asomaban, haciendo contraste con la morena y tersa piel dandole una apariencia inusual, hermosa, pero la mirada y las maneras de comportarse le restaba toda la estética que potencialmente tenía.

-Hoy Claudia está particularmente callada- dijo sárcasticamente; su hermanita menor era muy ruidosa ciertos días de la semana, pero ella aprendió a lidiar con esos ruidos...ella se lo buscaba con esos amigos imaginarios que tenía, que suerte para sus dos hermanos que ella existia, ella, abnegada como sólo una santa puede serlo, o eso se decía a si misma.

Su hermanita, su Hermanita, su hermanita...era, aunque categóricamente lo negara a cualquiera, el otro asunto que tenía en la cabeza por mas de siete meses, desde que llegó el amigo imaginario de Claudia estaba más calmada, todo se iba resolviendo gracias a ella, la Gran y Abnegada Andrea.

A sus venticuatro años, Andrea se encontraba en un limbo sin ganas de salir de el, por lo menos ya n tenía que hacerse cargo también de sus inútiles padres, ya no tenía preocupaciones monetarias gracias a su hermano Carlos, "Simplemente por eso soporto sus cosas, y lo acepto como es porque somos familia" pensaba, y lo repetía a modo de mantra contra la desesperanza...

Toc...Toc....Toc...Toc...bzzzzt....bzzzzt,bzzzt.

ese sonido que sentía átras de la nuca le indicaba que ya se aproximaba su hermano.

-ya empezó- dijo con desgano, hastiada- espero que no haga mucho desmadre esta vez.-

Limpiar lo que ensuciara Carlos al entrar era lo único que la separaba de su mullida y cómoda cama, donde podría dormirse sin frío.

Con un gusto renovado gracias a esta esperanza fue por el balde de agua fría, también tomo un poco de jabón Roma...Entró como tornado su hermano, manchó poco en el camino al cuarto... Andrea suspiró, revolvió el jabon con el agua fría...
hasta ahora era lo que mejor quitaba las manchas del piso...
y cansada limpió el enorme rastro de sangre ajena hasta la puerta del cuarto de su querido hermano mayor...